PALESTINA

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¿Ha aumentado la represión con el Gobierno de Sharon?

Indudablemente. Desde la llegada al Gobierno del criminal Sharon se han producido más de setenta asesinatos selectivos, entre ellos, el de Alí Mustafá dirigente político no militar del FPLP.

Se está aplicando a rajatabla la línea de acción de Zeevi, ministro de Turismo, ejecutado por un comando del FPLP, quien decía que el mejor palestino era el palestino muerto, y si alguno quedaba vivo, había que echarlo de Israel y sus fronteras. Cuando Colin Powell visitó a Sharon en el momento de una invasión del Tsahal al territorio palestino y le dijo que debía salir cuando hubiese finalizado su trabajo, le dio explícitamente luz verde para toda clase de masacres contra el pueblo palestino, como la ocurrida en la aldea cristiana de Mesrina, en la que a las dos de la mañana sacaron a la calle a todos sus habitantes, igual que las razzias nazis a los barrios y judíos, asesinando públicamente a 29 pobladores.

Otro aspecto de la política israelí del que no se habla, habitualmente, es el de la represión económica, la confiscación de tierras, destrucción de casas, envenenamiento del ganado y controles continuos. El paro en Gaza alcanza el ochenta por ciento de la población activa; en Cisjordania, al cuarenta y ocho por ciento; las exportaciones palestinas están controladas por Israel y deben pagar aranceles de los que están exentos los colonos judíos, quienes además perciben subvenciones por ocupar nuestra tierra. Las importaciones de productos perecederos se pudren durante meses en los aeropuertos judíos antes de llegar a Cisjordania o Gaza, único aeropuerto internacional que teníamos en los territorios ocupados, que ha destruido la aviación israelí. En ese contexto, ¿que persona decente puede llamar terroristas a los palestinos que defienden su tierra y su pueblo?

¿Pero qué es lo que usted piensa que está sucediendo después del once de septiembre?

Se ha incrementado la presencia norteamericana en la zona. Y se ha relajado el interés internacional contra la barbarie sionista, lo cual ha sido aprovechado por Sharon para apurar al máximo la intervención militar en Cisjordania y Gaza. Nosotros, como internacionalistas, condenamos la guerra contra la población afgana, que se está muriendo por falta de alimentos, mientras sólo recibe bombas de quienes no tienen otra preocupación que el control de las reservas petrolíferas de la región. También estamos muy preocupados por la suerte del pueblo hermano irakí, que sufre un salvaje embargo que ha ocasionado un millón y medio de muertos, la mitad niños, por falta de medicamentos y que está sufriendo las trágicas consecuencias del uranio empobrecido con el que fue sistemáticamente bombardeado durante la Guerra del Golfo. Nos preocupa Siria, que está siendo objeto de fuertes presiones. Somos solidarios con todos los pueblos del mundo amenazados por el imperialismo.

Históricamente, la izquierda Palestina ha reivindicado un Estado multiétnico y laico: ¿usted piensa que sigue siendo así?

Por supuesto, queremos un Estado democrático, en el que todos vivamos en paz, un Estado con libertad de culto religioso, sin una confesionalidad específica, un Estado laico. La pluralidad religiosa está en las raíces del pueblo palestino: el treinta y tres por ciento de la población palestina es cristiana y el diecisiete por ciento, judía. Hay que subrayar que el fanatismo religioso en la zona fue instigado por EE UU en su lucha contra la izquierda revolucionaria en Afganistán y otros lugares de la zona. Acaso hay que repetir que Bin Laden trabajó para la CIA en los años setenta y ochenta contra el Gobierno popular y democrático de Afganistán. Pero este estado multiétnico y plurireligioso nunca será aceptado por el movimiento sionista, pues sería el fin del Estado racista de Israel en su actual configuración política. Por eso decimos que el Estado de Israel tiene miedo a la paz, porque su mantenimiento exige el militarismo y la guerra.

Extracto de una entrevista a

Fayez Badawi,

que es portavoz del Frente Popular para la

Liberación de Palestina (FPLP),

en la Península Ibérica.

La entrevista está publicada en el número

http://www.nodo50.org/elotropais

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